miércoles, 9 de diciembre de 2009

Mi suma.


(...)Tengo en mi placard un domingo de risas, y un lunes agitado. Un arcoiris mientras llueve, y el color carmesí en las mejillas. Tengo un cuento que aún se está escribiendo, y un torbellino de ideas todavía inconclusas. Un martes de sol ardiente, y una plaza de otoño.
En mi memoria guardo un lago rodeado de montañas, las rutas del sur, y un sonido de abrazos que a veces hasta me aturde. Para cuando lo necesite, busqué un miércoles de descanso, y una caja de amores pasados. Muebles pintados de mil colores, y un vino tinto para las noches de frío. Tengo un video de sonidos del alma, un baúl pesado, pero cargado con miles de frascos de colores.
En un rincón de mi habitación, escondí un jueves ansioso, y chocolates que curan heridas del corazón. Tres notas musicales, y varios tambores de fondo. Y hasta tengo un viernes de sueños, y diez oleadas de aire fresco en la cara. El mate de las tardes bajo mi árbol favorito, y una pintura sobre el pasto. El recuerdo de un sol que encandila, y la sensación de paz en el alma. Un sábado de verano, y un trago largo de vodka.
Tengo fotografías del mar, y el sonido del vidrio. La planta mas bonita de todas en mi ventana, y un ambiente claro. Escaleras desordenadas, puertas que no llevan a ningún lado, un cenicero lleno, y miles de vuelos nuevos. Un barrilete de papel de diario, un cuaderno para escribir, hojas desordenadas, papeles escritos por doquier, pinceles gastados por tanto uso, bastidores que llenan los rincones de mi departamento, un viaje con mochilas por venir, baquetas nuevas, para un nuevo sueño, varias promesas por cumplir, y cada día de la semana que son míos.

martes, 1 de diciembre de 2009

-



(...)Y en ese momento, el sintió una revolución en su ser, un cosquilleo que pasaba por todo su cuerpo y lo recorría hasta la punta de los dedos de los pies. Y que luego, suavemente, se deslizaba por los pliegues de la sábana que los cubría.
El, por momentos se preguntaba cuando fue que habían cambiado el rumbo de las cosas que en realidad deberían pasar. Un rumbo que el había planeado detallada y estratégicamente, y que sin pensarlo se había comenzado a desmoronar. Ya que el, había comenzado a fundirse en el alma de aquella maga solitaria que estaba a su lado. Ella, que ahora acariciaba suavemente su cabello y se enredaba con gracia entre sus piernas. En ese momento no pensaba nada, sus ojos permanecían cerrados, serenos, pero no dormía. El la observaba con calma, repasaba los detalles de su rostro, disfrutaba verla en esos momentos, ella bajaba ese escudo que corrompe, que lleva a todo el mundo por delante, sabía que el podía protegerla, , sin darse cuenta comenzaba a dejar dulces huellas sobre su espalda.
En aquel escenario donde la música de blues se oía a lo lejos, la luz tenue se mezclaba con el aire que aún estaba cargado de un humo que los volvía transparentes y de cristal. Las cenizas inundaban el único cenicero de la habitación, y un aroma mágico yacía en el sabor de sus labios. Los tambores de sus cuerpos latían al compás de los sonidos, y los primeros rayos de la mañana comenzaban a verse a través de las cortinas.

-¡Hasta sin besos nos hemos quedado!
(Risas)

domingo, 8 de noviembre de 2009

"Esta noche"

Esta mañana, lo comprendí. Por eso, quédate conmigo esta noche, no prometo soñar contigo, pero al menos podría intentarlo. Porque decidí que quiero ser parte de esa magia q desprendes de tu ser, que hace que toda la habitación se llene de luz. Tu energía, clara y brillante, esa que se junta con la mía, totalmente alborotada y cambiante, pero que logran formar las notas musicales mas bonitas.
Y puedo contarte miles de historias inventadas, que hablen de hadas y brujos, aunque te rías de ellos. Puedo enseñarte lo que sé, ver contigo las películas de mis sueños, y los libros que me hacen volar. Puedo decirte el nombre de mis artistas favoritos, mostrarte colores que de seguro aún no conoces, y pintar miles de cuadros si me lo pides. Puedo creer en vos, si me lo permites. Y puedes creer en mi, que yo te aseguro tomar tu mano cuando camines sobre cuerdas. Puedo, y se que si, dejar a un lado de la ruta mi mochila de dudas y soledades, tan solo necesito de tu respiración. No puedo nombrarte el mago de mis cuentos, ese mago ya tiene nombre tatuado sobre la espalda. Pero puedes ser lo que quieras, para ser el príncipe que me rescata no creo que estés preparado, se que aún le temes a las alturas. Y creo que yo tampoco lo estoy, aún debo superar algunos pozos para nombrar al co-protagonista de mi cuento. Pero los papeles y lápices están dispuestos a escribir lo que desees.
Esta noche, puedo escucharte contar penas de amores pasados, y entenderte cuando actúas con miedo, porque yo siento lo mismo. Pero puedo compartir mi libertad, intentar mezclarme con la tuya, y despertarme a tu lado con el sol. Encandilarte cuando duermes, y besarte mientras estés despierto.
Esta noche puedo todo, es que ya no quiero sentir este alboroto dentro del pecho, estas ganas incontenibles de largarlo todo, no quiero mas domingos con sabor a recuerdos, ni borracheras inundadas de lágrimas. Esta noche quiero que se marche Soledad.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Vivir.

(...) Hoy no quiero que me declaren la guerra, ni un caos incontenible en el medio del pecho. No quiero espinas, ni batallas campales. Me conformo con un poco de aire fresco, y libertad.
No quiero volcanes a punto de estallar, ni besos marchitados en horas perdidas. Ya no busco tormentas escandalosas, ni copas rotas por las noches. Me gustaría alguna planta con sabor a paz, un vino reservado para las noches de luna llena y varias caricias guardadas debajo de la almohada.
Hoy, no quiero irme a casa, prefiero volar... solo dame algún respiro para que no olvide que es real. Y no dejes que sueñe tanto, tantea de vez en cuando que no me haya escapado por el balcón del living.
Hoy, puedo ser caprichosa y pedirte tres amaneceres de película, muchos tambores sobre una arena blanca, y que me enseñes a tocar melodías del alma. Un paseo por las nubes de vez en cuando, y mucho, mucho, viento salado... ese que viene cargado con espuma de mar.
Y tal vez... tal vez puedo pedir que me borres el pasado, que lo lleves al cielo del olvido, que cantes mil canciones y que cada acorde tenga mi aroma al sonar.
Pero prefiero no esperar, ni pensar, ni pedir, ya que estoy aprendiendo una costumbre que practicaban los magos antiguos, tan solo vivir.

lunes, 19 de octubre de 2009

Ella.


(...) Y a pesar de esto, todavía nadie había inventado un arco iris para que ella lo contemple al atardecer, ni le habían regalado una lluvia de verano, de esas que calman ansias. Mozart no la había hecho parte de alguna de sus melodías, Picasso no había pintado su retrato sobre la arena, Coelho no había dedicado un libro a sus aventuras de vida. Tampoco Hendrix había tocado algún acorde en su honor, ni Charly había compuesto algunas letras sobre el sabor de sus labios. Su voz no había sonado nunca en la radio, no fué tapa de alguna Rolling Stones, ni su nombre primicia en la TV. No había dado un solo autógrafo en su vida, y mucho menos la muestra de su alma en alguna galería de arte. Sus escritos aún se perdían en el viento, los colores se mezclaban en su pincel, y todavía intentaba aprender a vivir -día a día descubría nuevas dificultades para respirar-.
Grecia y Roma no estaban en sus próximos planes, y el océano no había tocado aún sus pies. Todavía no había perdido, por completo, la cabeza por amor, y tampoco había juntado las ganas y fuerzas suficientes para marcharse al lugar de sus sueños. No podía volar entre las nubes, ni alcanzar las estrellas con las manos. La luna aún se veía muy lejana, hasta en los días de mucho viento. Los globos aerostáticos pertenecían a ideas de su imaginación, y lógicamente, nunca había visto la luz en el hombro izquierdo de alguien. No había bailado al compás de tambores y fuego, bordeando la infinidad del mar, tan solo era un anhelos de su interior. Y todavía por momentos intentaba descubrir las pócimas secretas de la felicidad.
Pero una cosa sí, ella había decidido que lo haría.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

"De despedidas"

(...) No se cual es el color musgo que abraza tus piernas, ya no recuerdo el dorado de tu piel. Últimamente olvido el azul que solía caer por nuestros hombros, y casi no recuerdo el color magenta de tus labios, con el cual alguna vez quedé encantada...El amarillo del sol, encandila solo viejas fotografías y tu aroma ya se me confunde con la miel, puedes ver que ya no te recuerdo en las mañanas de mucho viento. Los astros casi no repiten tu nombre por las noches, y el olvido va borrando poco a poco el color de tus ojos. Según me contaron al pasar, algunos suspiros se desmoronaron por falta de sueños, y a otros varios le faltaron al menos un respiro. Verás como el tiempo y yo somos aliado, nos volvimos cómplices. Tenemos treguas y secretos que no pienso contártelos nunca, porque prometimos al cielo maravillas, y aunque cueste creerlo hasta volver a creer en el amor. Por fin es el, quien comprende mis razones...
Hoy, yo soy verde como la hoja, fresca como las brisas del mar. En cambio vos, yaces vivo, pero enterrado en algún jardín de flores de otoño.
Ya salí del encierro, aprendí todas las claves que escondías. Ya no te creo el brujo o el mago de algún cuento encantado, por eso verás como los sonidos de mi ombligo te olvidaron, ya no tengo tus marcas sobre mi. Nunca mas formarás parte de los días alborotados, de las tardes de truenos y tormentas, y menos aún de mis pinturas. He olvidado hasta el nombre de tus nubes favoritas, ya no recuerdo que te hacía tan especial, ni como con el mas simple de los hechizos lograbas que yo pida a gritos por esa droga amarga que guardabas en tu cuentagotas de amor. Aunque sigo sin comprender como aún hoy, te escribo. Pero un hada muy sabia me dijo en algún sueño, que es tiempo despedidas, y acá esta la mía... Despedidas de promesas sin sentidos, y rosas marchitadas, de fugacidades que después, duelen fuerte en pecho, de esas que se llevan el aire de montaña, con las que cuesta respirar, pero se que hoy evolucionan, y hasta están logrando convertirse en aires de la primavera de algún nuevo amor.

martes, 18 de agosto de 2009

-Un secreto-


(...) Había miles de historias que escribieron juntos, sueños anhelados desde lo mas profundo del alma. No eran mas que un saco de lana y un espíritu sereno, algo de paz por las mañanas, y una vida al compás de los tambores de su espalda. Sabor a angustias, y olvidos nunca cumplidos, algunas piscas de ternura -que si mal no recuerdo olvidaron en un bolso aquella noche de verano- y besos con sabor a lluvia y lágrimas. Abrazos que viven con una sensación de culpa en las entrañas, y distancias infinitas sin sentido. Cuerpor alegres, pero la falta de armonía en sus almas. Buscando siempre soluciones en lugares equivocados, alejándose y chocandose entre si, como una escapatoria sin sentido de los problemas. El quería vivir, y ella nunca entendió su manera de hacerlo... Es que a veces lo sentía a su lado, tanteando a oscuras, sin saber bien como actuar o que hacer, buscandose en lugares inóspitos, y encontrando solo algunos instantes de calidez que podían sentir en el alma, y unos brazos alrededor del cuerpo. Esas veces no lograban separarse, pero el siempre se alejaba con los gritos del amanecer , se encondía inseguro, y vuelvía con la luna. El tiempo pasaba, y pronto, y sin entender el porque, se vieron embriagados de amor. Pero después de las borracheras, siempre llega la mañana. Y en esa mañana ventosa donde los tumbó la tristeza, y una oleada de melancolía cubrió el aire de lágrimas, de noches vacías y estrellas opacas. Un frió helado pasó por sus espaldas, ese frío que mata mariposas de colores, y cubre el aire de una neblina que nos pierde. Cuando miraron nuevamente alrededor, todo se había esfumado. Un rayo oscuro paso por sus pechos y se llevo todo. Recuerdos y besos, batallas ganadas y perdidas, gritos y risas, se llevo todo, nada recuerdan de aquellos abrazos con la luna de testigo.


Pero aún hoy, despues de varios amores, no entienden porque se entristecen sin razón en los días de mucho viento, y se escapan, y huyen del mundo, y lloran desesperadamente, buscando algo o alguien que quite el vacío de sus corazones, pero todavía no logran encontrarlo. Son algo asi como unos "profugos del amor olvidado". Pero luego de algunas horas infinitas, logran secar sus lágrimas con hojas de otoño, y simplemente vuelven.


viernes, 14 de agosto de 2009

Sueños.



-Aunque casi ni me creas, aún imagino que somos dueños de un mundo lejano, de algún universo paralelo. Donde el sol nunca se apaga, y las noches tienen una luna que irradia luz sobre el mas maravilloso manto de estrellas, una pegada a la otra. Donde por el día vuelan globos color celeste claro, y al pasar de las horas podemos ver como se pierden entre las nubes de algodón de azúcar, hay varios árboles que nos redean que los pintamos color tiza, y un aroma a café amargo y canela inunda nuestra mente.
Sueño que sos mio, pero que compartimos libertades, y corremos suavemente en busca de las brisas de la próxima estación. Y sueño que soy tuya, pero compartimos soledades y las convertimos en arcoíris tornasolados.
Que no existe la fugacidad, ni el tiempo, es pura primavera. Que mi alma brinca mientras duermes, y vivimos reposando bajo el calor del sol, bien lejos del mundo pero muy cerca del cielo de tu ombligo. Sueño que soñamos por tiempos infinitos, por ensima de los arboles florecidos, y con dulces melodías de fondo, que nunca cesan. Y donde a los lejos se oyen cascadas y sonidos que nos devuelven esa paz que alguna vez perdimos. Con los cuales reímos, lloramos y volvemos a reír con la compañía de la armonía de las almas. Y nuestras carcajadas se mueven al compás de las olas -si, también hay mar, hay todo lo que deseamos- por eso nos enredamos en ellas y bailamos sobre su espuma, descalzos sobre la arena cristalina. El agua es tan pura, tan transparente, que aún en la profundidad puedo ver tus pies.
-¿Que mas?
-...y por las noches nos perdemos, nos buscamos en la neblina, y volvemos a encontrarnos con los primeros rayos de sol que iluminan el paisaje. Somos eso, somos parte de la naturaleza, la sentimos en lo mas profundo de nuestro ser, y ella nos siente, y nos envuelve consu aroma. Nos mezclamos, nos hacemos uno. Y no existe nada mas, solo la infinidad de lo que podamos soñar, y el no-sentido del tiempo, el aire de eternidad...

miércoles, 5 de agosto de 2009

ENLOQUECER

Y enloqueció, y pronto volvió a soñar con el. Con noches de lunas llenas, días de mucho sol, y tal vez un poco de frió por las tardes. Enloqueció por completo, se soltó el cabello y dejó que este se despeine al compás del viento, quitó las sabanas viejas y las flores marchitadas que habían quedado olvidadas en algún libro.
Sus días comenzaron a ser mas tibios, y llenos de luz. Entonces supo que el momento había llegado. Armo una pequeña valija, solo con lo necesario, y se marcho en busca de algunas brisas que quedaban de aquel amor. Y sonrió, sonrió al encontrarlo a el dispuesto, tal como antes. Descubrió que el tiempo no había pasado para ellos. Que sus manías continuaban siendo las mismas, que su mirada -al igual que antes- se iluminaba al encontrarse con la de ella, y sus risas igual de holgadas. Reían a carcajadas, y se rendían el uno al otro al encontrarse en largos abrazos cada noche. Amandose por el tiempo perdido, por el pasado que continuaba en sus memorias, por los buenos y por los malos momentos. Por las ansias encontradas, y esa sensación que tanto extrañaban cuando sus almas se hacían una.
Ella recuperó varios sueños, algún que otro suspiro, y ese brillo que yacía olvidado y que tanto la identificaba. Y el brilló, como nunca antes, se entrego por completo a su viejo amor, y dijo palabras que nunca se había animado a decirlas.
Esta vez, no importaba si resultaba o no, si perduraría o se desplomaría ante el primer abismo. Esta vez, solo se prometieron disfrutar y sostenerlo, sostenerlo de única manera que conocían, con espontaneidad y cantidades inigualables de besos, esos besos que ultimamente habían desperdiciado en algunos cuantos amores baratos y olvidos fugaces. Por eso digo que enloqueció, ella como hace mucho tiempo no lo hacía se jugó por la única persona que permanecía en su corazón, por la única persona que el tiempo no había borrado.
Volvió, vivió y enloqueció. Tal como anhelaba, tal como lo soñaba, y como había imaginado por tanto tiempo.

miércoles, 1 de julio de 2009

Entre Brujos y Hechizos, "Por si algún día me marcho"

Por si algún día me marcho te dejé tres estrellas y varios soles dentro del placard, algunas caricias en el cajón, y caramelos con sabor a besos debajo de la almohada. Una canción que nunca cantamos sobre la mesa, y un abrazo entre las sábanas. Si se me ocurre largarlo todo, irme muy lejos, antes te prepararé un pastel de sonrisas, y lo dejare junto a tu puerta. Te daré un beso mientras duermes, y te susurraré palabras dulces al oído, para que siempre tengas sueños de lunas, y payasos, de risas, antojos, y así nunca te olvides, ni te canses de soñar. No te diré nada, tal vez te pediré que tomemos algún vino y brindemos, porque alguna vez juntos volvimos a creer en el amor. Y pediré al cielo que te conceda algunos deseos, y también me asegurare que busques otra compañía, sabemos que no puedes vivir sin amor.
Y yo, yo guardaré tu calor en un frasquito de cristal, y lo pondré ene l lugar mas seguro de la valija, me llevaré unas piscas de tu aroma, y algunos besos para las noches de invierno. Te tomaré fuerte la mano antes de marcharme, para dejar tus huellas, por siempre, en ellas. Te dejaré algunos suspiros y muchas melodías en algún rincón de la habitación, no borraré tus marcas de mi piel, nunca podría, y dejaré mi perfume en tu espalda, en tu ombligo, y detrás de tu cuello.

Pero si algún día decido marcharme, intentaré de todas las formas que lo percibas a tiempo, así puedes tomarme fuerte de la cintura, y con un beso de película me convenzas soltar los bolsos, y volver a mi lado de la cama.

lunes, 8 de junio de 2009

Quizás.

Tal vez, porque ella no podía inventar soles por mas que lo intente, tan solo algunos destellos, pero era feliz con ese poco, y el nunca lo comprendió. O quizás, se trataba de sus cambios, de sus días de melancolía, de su voz baja, su desconfianza, o tal vez su inseguridad con algunas personas, lo que el nunca entendió era que solo lo hacía para protegerse. Tal vez, era porque ella solía disfrutar su soledad, pero el nunca entendía que estaba dispuesta a compartirla, asi como sus amigos de la literatura, quienes lograban enseñarle mas que muchos otros.. Sé que muchas veces pensó que había posibilidades de que se tratara de sus extraños saltos, de sus inquietudes, y su forma de moverse, nunca al compás del mundo. O quizás su imaginación que la hacía perderse lejos del mundo por horas, jugandole muchas veces, una mala pasada. Al igual que sus ansias de volar lejos, o cuando le rogaba que la convirtiera en aire, y el sin entenderla largaba una fuerte carcajada, que rompía cualquier silencio de ella. Tal vez, el pensaba que se trataba de las discusiones, de las diferencias que alguna vez los enamoraron, por sus miedos, por sentirse atada, de verse sofocada con tan poco, cosas que el nunca pudo entender. O quizás por sus raras creencias, sus comentarios, que el, creía absurdos, sus ganas de largarlo todo, cambiarlo todo por las mas simples de las simplesas, como en aquella película que habían visto juntos, que para ella significaba sueños, mientras para el locuras sin sentido. O tal vez, pensó, porque no soportaba ver como ella podía hacer enloquecer su corazón con solo algunas miradas, y su pasión por cosas que el no creía importantes, como como ¿el fuego? decía que nunca lo podría entender, y le causaba gracias cuando ella, seriamente, relataba sus historias y lo practicaba como el ritual que era, aunque secretamente deseaba verla siempre sumergida en ese abismo en el que se encontraba cuando formaba parte de estos, y hasta lograba comprenderla, y a pesar de esconderlo bajo su orgullo ella lo sospechaba, y aunque ella nunca lo dijera, el era parte de ese ritual, de ese calor, de esa mezcla de cuerpo, sonidos, y alma.
Y ahora, el, ya se había cansado de esperar que regrese -como siempre-, ya no soportaba vivir sin luz, y no podía encontrarla en ningún rincón de la casa, ya su aroma se había esfumado por el balcón del living. Y el, desesperado, comenzaba a buscarla incansablemente en la neblina que se asomaba por la ventana, pero la sentía cada vez mas lejos. Y precisamente estaba en lo cierto, porque quizás, el se había demorado, y ella había decidido no volver, ella se había decidido por sus sueños, y se encontraba muy lejos de la ciudad, disfrutando una vez mas sus soledad, aunque en compañía de las estrellas, y varios destellos que aun la acompañaban.

Quizás paso eso, pero quizás no.. y la historia da un vuelco donde desde lo lejos podemos percibir, un final feliz..

sábado, 9 de mayo de 2009

¿Bailás comigo?

Ahora, ahora baila conmigo. Vamos a inventar paraísos de colores, intentemos la locura total de la vida. Vayamos lejos, a construir un sol, o al menos algún destello. Dejemos atrás mochilas que pesan, deshagamosnos de nuestro pasado, que ya nos llena de nada y nos vacía de todo. Llevemos lo mas lejos que podamos al dolor, y luego... luego conviérteme en aire, mientras yo lentamente te transformo en brisa. En brisa de viaje, en brisa fresca, de mañana de otoño. Donde se junta con el viento, cuando este pega fuerte en la cara, y nos vacía, pero solo de miedos y angustia.
Y así, medio volando, de a ratos bailando.
Tómame fuerte por la espalda, dime las cosas mas bonitas que puedas inventar. Y bésame, bésame como nunca antes, como grandes amores de la literatura.
Y así, medio dormido, medio enredado.
Susúrrame palabras de amor al oído, para que de verdad creamos ser protagonistas de aquella película del cine, de una historia diferente, donde no todo es desenfreno y sexo en la vida, donde existe algo mas, existen cosas pequeñas cosas que llenan de verdad el alma. Donde vos me enseñas a deslizarme en el tobogán de tus sábanas, por la rivera de tu espalda. Donde me contagiás tu sabor a libertad, a esa que viene sin ataduras, que limpia y llena de vida. Ahí, donde me desvelás por las noches, donde tu luz encandila. Y mi corazón, junto con el tuyo explotan, y enloquecen de algo, que algunos, suelen llamar amor. Y contagiemos, contagiemos al mundo eso que vivimos, de esto que nos pasa, y de aquello que nos devuelve sonrisas.
Entonces...¿Bailás conmigo?





Blanky escribió "(...) este escrito fue motivado por Flor, la consigna era que debe tener las palabras vida, amor, literatura, sexo, viaje, cine, voy a nombrar a cinco personas que me gustaría hicieran un escrito, un poema, etc, con estas palabras las nominados son: Coke, Mnémosine, Leo, Primavera Fugáz, Moboga."
Acá estan esas palabras enredadas, cuanto pude, y muchas gracias por la consigna.

viernes, 24 de abril de 2009

Había una vez...

Había una vez, un lugar repleto de emociones, de emociones de todo tipo. En el aire se sentían diferentes energías, que al pasar por el humo de cigarrillo que ella llevaba en la mano se convertía en una, en la más poderosa. Había miradas muy fuertes, miradas que transmitían. Había besos escondidos, y secretos nunca contados. Y había amores. Amores reprimidos, amores descontrolados, amores de vida, de tiempos, y de todas las épocas. Amores cansados, agobiados, amores recientes, demostrativos, amores llenos de besos, amores infantiles, amores de deseos, de algunas noches, de varias copas, y amores puros, por supuesto, no muchos, pero los suficientes para llenar de ganas el aire. El aire donde la música sonaba a un compás sereno, tan sereno que hacia mover los pies de manera tan delicada como los anillos que ella llevaba esa noche, en realidad todas las noches, ya que no se animaba a sacárselos, los creía mas bien como amuletos, de buena suerte tal vez. Como la cadena que caía por el cuello de él, a la cual, él secretamente confiaba sus dichas, y desdichas. Las luces bajaron, las horas pasaron. Los pies comenzaron a alborotarse, los cuerpos se chocaban sin control. El aire era festivo, ELLOS se habían olvidado de sus últimos domingos de melancolía. Los ceniceros rebozaban y las copas no daban abasto. La luna permanecía brillante en el cielo, iluminando el sendero de dirigía a aquel lugar. Las ventanas rebozaban de amor, este corría por debajo de las puertas, intentaba escaparse, pero entre el humo, y las risas, cambiaba su idea, se dejaba llevar por las nuevas horas que corrían. Y decidió entrar en cada una de las personas que estaban aquella noche. Entro en lo más profundo de él, corrió por sus venas como nunca antes, quebranto sus pensamientos, y se llevo por unos momentos los malos recuerdos. Y se choco con ella, que ansiaba algo nuevo en su rutina. Ella, que quería que nuevos vientos la despeinen, que el sol ilumine su rostro. Ansiaba profundamente que este se llevara -por siempre- antiguos recuerdos. Revivir, y que su corazón también lo haga. O comenzar a vivir, hacer borrón y cuenta nueva. Por eso, esa noche, había decidido algo. Decidió comenzar de nuevo, nada de lo que había pasado le pertenecía ya. Alejó promesas, y todos aquellos que pasaron por su vida. Alejó recuerdos, logro deshacerse de todos. Mientras reía, y bailaba de manera descontrolada, saltando, sonriendo, y cantando sin ritmo. Él la vio. Miradas, complicidad, sonrisas. Un buen comienzo. Ella estaba decidida a encontrar un nuevo amor. Pero de esos que valen la pena, ya se había cansado de refugiarse en frases sin sentido, en gente que en realidad no le pertenecía, de amores prestados, y sueños alquilados. De lagrimas desperdiciadas, y de la falta de cariño en los días de lluvia. Esa noche, fue ella. Bailo como se le dio la gana, y mostró su poca habilidad para coordinar con la melodía. Cantó a los gritos, dejando al descubierto su falta de entonación. Hablo con quien se le dio la gana, y no se dejo convencer por habladurías apuradas, y sin ganas. Apago el celular, se desconectó de su pasado. Se libero, y rió nuevamente. Descanso, y miro al cielo estrellado, confiando en las estrellas. Y nuevamente, se cruzaron.
-¡Cuanto tardaste! Te estaba esperando, anda, córrete un poco que me quiero sentar a tu lado.

lunes, 13 de abril de 2009

Ella, y la libertad.

(...) Pero esta vez venía cargada de una fuerza inmensamente grande, una fuerza superior. Una fuerza que prometía quedarse por siempre.
Ella la estaba esperando, y por fin sintió la brisa que corrió por todo su cuerpo. Casi podía tocarla, alzaba las manos bien altas para lograr alcanzarla, mientras imaginaba que era un pájaro, tal vez un ave fénix renaciendo, mientras soñaba despierta que volaba. Estos, eran indicios que poco a poco estaba volviendo a su ser. Pero esta, venía muy serena, perdiéndose por momentos con las hojas, revoloteando en la cima de los árboles. Pronto, trajo un viento fuerte -de esos que desarman estructuras- que ella, enseguida lo percibió y dejó que refresque de a poquito toda su alma, y que alborote aún mas su oscuro cabello. Ella pisó el pasto, miró a sus pies descalzos que se mojaban con el rocío y se mezclaban con la tierra, mientras lo primeros rayos del sol iluminaban su cara, haciendo que sus ojos poco a poco se cerrasen, que respiraran de una vez por todas profundamente, al menos por unos segundos.

De pronto, un sonido, un murmullo, y el canto de las aves, había llegado.
Y con las verdes praderas de escenario, y el ruido de las cascadas oyéndose de fondo, se encontraron. Ahí estaban, frente a frente. Ella sonrió, hacía tiempo esperaban ese momento, y ahora ella estaba preparada para recibirla. Abrió sus brazos al cielo creyendo ser un pájaro, pero creyéndolo con cada parte de su cuerpo. Inclinó la cabeza para atrás, dejándose llevar por los vientos, y gritó. Gritó tan alto como pudo, cosas que nunca imaginó poder decirlas, ni siquiera pensarlas, palabras inventadas, y frases sin sentido, y rió, rió a carcajadas muy fuertes, y al compás de los sonidos de su alma.

Había vuelto, la libertad era nuevamente parte -esencial- de su vida.

sábado, 11 de abril de 2009

Hasta tus nubes

(...) Elevarme así, hasta tus nubes, reposar en ellas y nunca mas despertar. Oír el alarido de tu voz, sentir la paz de tu silencio, pero tan solo algunas noches de luna llena despertar,con la sensación de algún viento fresco, encontrarte a mi lado,regalarte unos suspiros y una canción,bajarte algunas estrellas, y encandilarnos con ellas.Acurrucarte entre mis brazos, entrelazarme con tu respiración, perdernos en el tiempo. Viajar en medio de los astros, prestarnos los sueños, y amanecer sonriendo entre tus besos.Dejarnos llevar por la brisa, y hasta a veces por los vientos.Flotar allá, cerca del sol, hasta quemarnos con su calor, perderme entre tus colores, y por siempre alumbrarme con tu luz, que se mezcle con la mía, que se haga una...Y de esa manera, elevarme así, hasta tus nubes, reposar en ellas y nunca mas despertar...(...)

domingo, 22 de marzo de 2009

Cuanto valia la pena...

Y desde aquella noche de luna serena, ella ya no quiso recortar mas lágrimas de papel de diario, tampoco juntar melodías de algún baldío de notas. Decidió nunca mas dejar de oír las carcajadas sonoras de las estrellas, ni volver a robar besos de algún bar. En esa noche, ella prometió dejar atrás esas pocas piscas de cariño en su vida, y se permitió lanzar por la borda aquel cuentagotas de amor. Así se olvidó de aquellos "te quieros" apresurados de alguna habitación. Y dejó que un nuevo aroma reposara junto a ella, se olvidó de las peleas, y se sacó la armadura que tanto la sofocaba algunos domingos, que luego de algún tiempo se oxido en un rincón. Se abrió a todas las tonterías que acarrea aquel nuevo sentimiento que corría velozmente por su cuerpo, por su alma. Y rió, rió a carcajadas y por horas. Demostrando así cuanto valía la pena disfrutar de estar vivo -y mas si a su lado se entraba aquel amor-.

jueves, 26 de febrero de 2009

"El amor es"

Solo porque sigues siendo quien me desvela por las noches, y me permite viajar con la imaginación a toda hora. A quien recuerdo, y quien me recuerda, a quien quiero que se quede ahí, en mi pasado, que no vuelva, pero que nunca se esfume. Quien me llena, y me vacía. A quien quiero bien junto a mi, muy cerca, a quien deseo abrazar en noches de lluvia, pero que temprano por la mañana se marche rápidamente, a quien prefiero a miles de kilómetros de distancia. Quien me llena con su luz, quien se mezcla con la mía, pero me vacía con sus planteos y palabras. Sigues siendo, quien me enseña a volar, pero nunca a aterrizar sin dolor. Quien disfruta la simpleza, algún cigarrillo, unos buenos tragos, y risas por doquier, y quien espera mucha mas de lo que yo puedo dar, y aceptar, o de lo que me permito hacerlo. Y seguirás siendo a quien recuerde en días de melancolía y noches de soledad, quien anhelo por momentos, y desaparece sin avisar. Quien mueve mi mundo con palabras vacías, y me devuelve las ganas de escribir con frases tontas y sin sentido. Por quien me lleno de odio y me protejo, por lo que fue, y lo que no va a volver, por lo que fuimos, y lo que nunca seremos. Por mis deseos y por mis dudas, por mis ganas y las suyas. Por no querer volver, y otras veces por anhelar su presencia.
Sigues siendo... ¿Y porqué? Porque, como dijo un grande, el amor es, y no hay mas palabras.

sábado, 14 de febrero de 2009

Valentin.

(...)
-Creí que este año te encontraría mejor... Es mas, según mis planes, debía ser así. No entiendo que pudo haber pasado... Lo siento mucho
-Y asi es Valentín, estoy mejor. Mucho mejor.
-¡Ah! Sos feliz entonces... ¿Y puedo saber cómo es su nombre?
-Vida, arte, alegrias y deseos, esos son sus nombres. Y no hay duda de eso. ¡Claro que soy feliz! ¿Cómo no puedo serlo? Por fin mis sueños comienzan a cumplirse... Acá estoy, comenzando el camino hacia lo que tanto anhelé, lo que tanto planee. Hoy lo estoy viviendo, y me voy, debo seguir haciendolo. Adios Valentín, ¡hasta el año entrante!

lunes, 2 de febrero de 2009

Despedidas...

Dar fin a una etapa, llenarse de melancolía, y mirar atrás con una sonrisa. Despedir, decir hasta luego a las personas que llevamos en el corazón, y abrirse a un nuevo camino.
Dejar atrás el pasado no, encontrar a las personas especiales, a aquellas que son parte de nuestra alma, llevarlas a nuestro futuro, llevarlas con nuestros sueños, y buscar un lugar para ellos en aquello nuevo que comienza, si. No hay palabras que describan, son abrazos, son lagrimas mezcladas, son miles de ideas que inundan nuestra mente. Son expectativas, ansias y miedos. Es comenzar nuestro propio camino, darle una bienvenida –como se merece- a eso que elegimos, y a lo que por tanto tiempo soñamos. Es decir hasta luego a personas que son todo, que son nuestras mañanas tardes y noches, atardeceres, promesas, lunas y cielos. Es no buscar un reemplazo para ellos, pero es si a estar dispuesta a encontrar a otros que llenen espacios, que quiten melancolía, y guarden nuevos secretos y risas. Es prometer con el corazón, y estar dispuesta a cumplir esas promesas. Es recordar, es advertir, ser felices de a ratos, y por ellos, por lo que les espera y falta por disfrutar, por nosotros, por lo que fuimos y por lo que seguiremos siendo. Y con algunos es saber que ahí, en medio de sierras y ciudad, las esperaremos para ayudarlas en lo que hoy nos pasa. Y con todos es hacerles saber que como siempre, ahí vamos a estar. Que no se va a terminar, que las cosas verdaderas del corazón perduran, no se marchitan, ni se borran con un viento, ni el tiempo, ni las distancias pueden con ellos. Ya lloramos, y lo seguiremos haciendo, por el afecto y la costumbre, porque las despedidas llenan de melancolía, y traen recuerdos, y traen carcajadas, y traen momentos inolvidables, y traen campos, y cenas, y gritos, y bailes. Y traen una mezcla de sentimientos, de sensaciones, y nos llenan de todo. Pero sabemos que ellos nos llenan mas de todo, porque llenan nuestras vidas y el aire de luz. Por eso si podemos con las despedidas, aunque creamos que no, somos superheroínas y lo creemos de verdad. Y podemos con todo, y lo sabemos. Y con las despedidas también, porque sabemos que cuando de verdad nos necesitemos, ahí vamos a estar, no siempre con el cuerpo, pero con el alma siempre.
Gracias a cada uno por tanto, siempre en mi. En mi corazón, y a mi lado.
A ustedes, las amo.
Y ya saben, por mas que pase el tiempo, algunos años, y las estrellas cambien de lugar, nos seguiremos encontrando, mirando las mismas estrellas, y con el mismo deseo de volar –cada vez mas cerca de cumplirlo- (...)

domingo, 25 de enero de 2009

"Para siempre"

-Y en todo este tiempo me he preguntado muchas cosas. Me preguntaba si seguirías siendo el mismo de siempre, si sigues llevando tu pelo alborotado y tu libertad a todos lados, si sigues bailando al compás de tu alma , ya que según vos, te mantendría joven. Aveces pienso cuanto me gustaría ver tu risa que arruga tu nariz, que con ver eso me alcanza. Me preguntaba si tu carcajada sería la misma, fuerte y reconocible, tu voz alta y llena de vida. También si alguna vez me recuerdas, porque yo si te recuerdo, cada vez que paso cerca del sol, o cuando me encuentro con algunas estrellas, o si volveríamos a encontrarnos, o cruzarnos en medio de la ciudad, o tal vez por otros campos. Volver a reconocernos, vernos como siempre, vos con tus soledades y yo con las mías. Me preguntaba si ya pasó ese momento que decías que vendría, donde las cosas se arreglarían, ese que pasa una vez en la vida. Por eso vivías muy atento, y buscando siempre los caminos nuevos, no sea que se te pase. Algunas noches pensaba si te reconocería, si seguirías llevando barba, y fumando a toda hora, y cuanto me gustaría compartir un cigarrillo, y alguna cerveza contigo, acompañada de mucho viento, llevar puesto un buzo grande, y tal vez algunos abrazos -es que sigo siendo la misma, a veces no puedo dormir, y mi imaginación vuela a toda hora-. También pensaba si seguirías llenando el aire con tu luz, así como llenabas mis espacios en blanco, y cada rincón de la habitación. Y me preguntaba si seguirías llevándote el mundo por delante, o si tal vez, habías cambiado.
-Es que si, ahora soy diferente. Ahora me protejo un poco mas...
-¿De qué?
-Del amor.
-Eso creo que todos aprendimos a hacerlo, o creemos haberlo hecho.
-Yo tal vez no me preguntaba tantas cosas, pero si tengo una duda, una duda que me persigue a todos lados.
-¿Cuál es?
-Me preguntaba si seguirías siendo...(tiempo) Si seguirías siendo la mujer de mi vida, y si te animarías a llenar -nuevamente- mi vida de todo, pero esta vez para siempre.
(...) ¿Qué dices?

miércoles, 21 de enero de 2009

(...) "Y finalmente.."

(...)
-Hola ¡Tanto tiempo sin verte!
-Si, mucho tiempo...
-¿Tu vida? ¿Estas saliendo con alguien?
-No no. ¿La tuya?
-No, tampoco. Lo de siempre.
-¿Varias?
-(Risa) Algo así. ¿Te gustaría cenar esta noche?
-Sorprendentemente... no. Me voy a quedar en casa.
-¿Qué pasó? ¿No querés que esta noche seamos unos amantes fugitivos?
- A prófugos del amor tal vez te referís.
-Si si, ¡eso!
(Tiempo)
-¿Sabes la diferencia entre nosotros dos?
-¿Cuál?
-Que los dos nos decepcionamos del amor alguna vez...
-Varias..
-En fin... nada
-Para, seguí hablando, quiero escucharlo.
-Que vos dejaste de creer en el, y yo todavía tengo esperanzas y creo, y quiero seguir haciendolo. Y aunque suene tonto. Porque yo si prefiero los finales de película, casados y con hijos, y no los finales heroicos. Prefiero la simpleza de la vida, y aparentemente vos no, necesito a alguien con quien compartir mi vida. Porque a pesar de todo creo que cada vez es diferente, y planeo seguir creyendo. Y además me parece que si dejás que el amor se borre de tu vida, ya no te queda nada. Yo voy a seguir jugandome.
(Miradas-Silencios)
-Entonces...¿Te llamo esta noche?
-Mmm, mejor dejá que seas un... buen recuerdo, no te preocupes, siempre vas a ser parte de mi. ¡Adios! y buena vida.
(...)

jueves, 15 de enero de 2009

Entre Brujos y Hechizos, "Prófugos del amor"

No serán los amantes perfectos, nunca serán la pareja del año, tampoco pierden tiempo en palabras absurdas. No tienen días específicos para festejar su amor , si se aman, nunca nadie lo sabrá.
Pero desde aquel día, están seguros de que se seguirán encontrando. Por mas que los vientos soplen diferentes, por mas que el mundo cambie su rumbo, y los arco iris pierdan sus colores, el día en que las estrellas se alinean, ahí estarán. Unos de esos tantos prófugos del amor. Se buscan, se encuentran, se miran una vez más. Hacen el conteo de los años pasados, y se miran nuevamente, se descubren sus nuevos vicios, y sus viejas costumbres y debilidades.Poco hablan de los años perdidos en el tiempo, se besan desesperadamente, y se abrazan como aquellos viejos recuerdos. Detrás de colillas y humo de cigarrillo sonríen por el pasado, y compartes algunas copas por lo que vendrá. Se sienten, se guardan, bromean acerca del amor. No hay espacio para reproches, nadie sabe si hacen lo correcto, y ellos, no se animan a sacar aquellos "te quieros" olvidados en algún balcón. Saben que es efímero, se disfrutan y se prometen mentiras. Pero saben, también, que se acá hasta el fin de los tiempo, cada vez que las estrellas nuevamente se alinean, y los astros lo decidan, se buscarán con la mente, y en alguna esquina de la ciudad se mirarán, sonreirán de manera cómplice, fingirán que ya nada pasa entre ellos, compartirán algunas palabras, y huirán lejos del mundo, lejos del tiempo, pero solo por un rato. Luego, volverán a la realidad , volverán a sus amores, y pasatiempos. Pero recordarán siempre esos días mágicos.
Son solo unos pocos, y el hechizo no dura mucho, por eso, los prófugos, lo disfrutan sin pensar en las consecuencias.
No podría decir cuales son las cosas que necesitas para realizar el hechizo, pero a ellos, podés encontrarlos caminando por cualquier vereda, solo podrías darte cuenta quienes son por una sonrisa escondida que guardan en su bolsillo, y una mirada serena, porque saben que hicieron, lo que en ese momento, dictó su corazón.

martes, 6 de enero de 2009

"Puras mentiras"

Me gustaría llamar a la radio para decir que te amo, y que sos lo mejor que me pasó en la vida, gritar a los cuatro vientos un SI para siempre, para toda la vida. Soñar con una casa contigo, tres hijos y un perro, vacaciones y cenas en familia, rutinas y días cargados de vos. Susurrarte al oído que sos todo, que por ti daría la vida, cruzaría mares y bajaría estrellas. Me gustaría poder escribir canciones y poemas famosos con tu nombre, que miles de personas los canten, los reciten, aún sin saber quien eres, pero yo – con una sonrisa pícara – saber que te tengo a mi lado. Me encantaría abrir un libro y sorprenderme al ver que me lo has dedicado, encontrar una pintura con mi rostro plasmado en ella, alguna fotografía mía guardada en tu cofre de madera, o tal vez alguna melodía que creaste pensando en mi. Me gustaría poder recordarte con una sonrisa, brindar por ti en las fiestas y desearte un buen año y buena suerte en tus nuevos proyectos. Me gustaría poder encontrarte por la calle, y darte un abrazo, poder compartir algunas copas contigo, y no terminar rendida en tu aroma y tu departamento. Pero por sobre todo, me encantaría poder mirarte a los ojos, que me digas algunas palabras y que mis ojos no terminen empapados, y mi alma anhelando tu amor y tus besos. Si, me gustaría decir que eres lo mejor que ha pasado, que me cambiaste la vida, y que serás el último hombre que me arrope por las noches, y me abrace en las madrugadas de frío. Pero serían puras mentiras.

"Por la magia del arte"

(...) Y por la madrugada de una noche de verano, me sorprendió con un beso, un beso que se lo había robado a alguna rubia en un bar. Apareciste, pero rodeado de excusas con las que intentabas pintar con colores el cuadro amargo con el que te habías marchado. Escribiste versos en mi almohada, como quien compone una larga canción de amor. Tallaste las palabras mas dulces en la puerta de entrada, para asegurarte de que quien entre después de ti, lo piense mas de una vez. Tocaste armoniosos acordes ene l sofá del living, acompañado de promesas inconclusas que prometían cielo, y a la vez infierno. Realizaste malabares con mis dudas, y con un perfecto swing me acomodaste nuevamente entre tus sábanas. Me contaste historias de hadas de la noche, duendes mágicos, y finales felices. Y me aseguraste que no habrían mas primaveras fugaces en nuestro camino. Y finalmente volviste a conquistarme, como por arte de magia, o por el arte de la magia, o mas bien... Por la magia del arte.