domingo, 29 de junio de 2008

Mi vida con ellas.

-¿Como son ellas?
Me preguntaste.
Que pregunta tan complicada.
-Ellas son mucho. Son diferentes, pero parecidas. Son mariposas, flores, y nubes. Son altas son bajas. Se juegan por quienes valen la pena, y por lo que creen. Tienen sueños y los persiguen. Avanzan, a veces se equivocan, pero se vuelven a levantar. Seguido reposan algún rato. ¿Pero sabes algo? Vuelan, vuelan alto, muy alto, y me enseñaron a hacerlo a mi también. Siempre se lo voy a agradecer. No todo es perfecto. Gritamos, discutimos, peleamos. Pero siempre volvemos a reír. A veces en conjunto, y siempre a carcajadas. Cuentan chismes –con mate y facturas- cantan, bailan. Revolotean. Lloramos juntas, contamos secretos, e imaginamos futuro. Vivimos el presente. ¿Sabes que haría? Las guardaría en un álbum, aunque en realidad, nunca podría. Necesitan de la libertad. Aman la naturaleza, desconectarse del mundo, campo, mientras fuman algún cigarrillo con una cerveza en la mesa. Hacen que cualquier momento, sea especial. Hay días que necesitamos una dosis de barullo, con música de fondo, nuestras voces hablando al mismo tiempo y las sonrisas incontrolables. ¡Sale merienda! Se oye. Y algún lugar se llena de todo. Los abrazos siempre están, anécdotas para recordar y mucha comida en la mesa. Nos cuidamos entre nosotras –quien lo haría o sino- y demostramos cuanto nos queremos. Somos felices juntas. Somos heroínas, Wonder Woman es poco, es mas bien una suma de poderes. Jugamos, hacemos prendas, fotografiamos, filmamos, nos extrañamos cuando alguna no esta, y esperamos ansiosamente los regresos. Según dicen los jueves va a ser otro día al que en algún tiempo lo voy a extrañar, cualquier circunstancia es valida para juntarnos y reírnos por un rato. El verano quedo atrás, con unas vacaciones que no tienen nombre, pero se viene la parte dos, disfrutemos del frio mujeres que se viene un invierno que va a dar que hablar. Y no se dan una idea de lo que promete el verano (un tanto lejos pero esta registrado). ¿Finales, despedidas? No pensamos en eso, o tratamos de no hacerlo. Vivimos hoy. Pensando en un mañana juntas y recordando aquel ayer. Si, te lo dije. Son mucho. Son todo. (...) Son mi vida.


(Faltan en la foto)

Deberia.

Y mientras miraba aquellas imágenes pintadas por el dijo
-Así debería ser el amor..
-Como?
-¿Lleno de duendes que tocan violines y vuelan?
Pregunto el confundido.
-Si
Respondió ella con serenidad.
-Debería ser.
-Para que?
Dijo el.
-Que, ¿Vos no soñás?
-Para que?
–otra vez-
-Hay cosas que no se preguntan. Que uno las hace porque hacen bien y punto.
-Prefiero no pasarme la vida en un mundo que no existe. Mira a tu alrededor ves duendes con instrumentos o voladores.
Concluyo en tono de burla.
-¿Ves?
Dijo ella tranquilamente.
-Por eso lo nuestro nunca va a resultar. Cuando tenés algo preparado me enamoras, pero cuando escucho las cosas que realmente pensás y que en realidad crees sacas toda la magia.
-Porque te digo la verdad, y para mi la magia no existe.
-Prefiero vivir en las nubes entonces.
-¿Y nunca caer en la realidad?
-Y si es menos doloroso, y me das a elegir
.(tiempo) Me quedo con mi mundo inventado, saco historias de mi baúl – donde se encuentran mis hadas que cantan por las noches- y por sobre todo creo en las cosas que hago(y que son mi vida). Ah y todavía no entiendo como vos pudiste haber pintado esto.
Dijo señalando al dibujo.
(...)
-Tal vez mi alma si es como vos.
-¿Y como descubro eso?

martes, 24 de junio de 2008

(...)Este cuento se ha terminado.

Llegaste alterado a mi casa ese día de lluvia, no dijiste nada. Tus ojos estaban mojados con lágrimas. Prendiste un cigarrillo tras otro. Yo te miraba, y trataba de comprender lo que gritabas a través de tu mirada desesperada.

Pero no dije nada. Me levante despacio y puse el disco que me habías regalado. Cuando volví, me miraste un tanto mas sereno.


-No puedo mas...
Dijiste.
- Lo sabes, esta ciudad nos volvió locos, y debemos salir de acá.
- No nos podemos escapar nomas.
Respondí.
- ¿Y si lo hacemos de todas formas?

Te mire por unos segundos que fueron eternos.

- ¿Y?
Preguntaste ansioso.
- ¿Te acordás lo que te prometí? "a donde vas yo te sigo" Y a mi también me volvió loca.
Dije mirándote a los ojos.

Las lágrimas comenzaron a correr por tus mejillas.
- Gracias.
Fue lo único que pudiste decir, y me abrazaste muy fuerte. Se que tratabas de demostrarme que me lo agradecias de corazón. Y yo lo comprendí.

Y se marcharon por siempre, muy LEJOS, donde -todavía- nadie puede llegar.
Y colorín colorado(...)

Todavía busco.
Tus ojos que transmiten a gritos lo que pensás, tu mirada transparente. El sonido de tu vos, tu risa sincera, y tu carcajada fuerte. Tu cabello despeinado -siempre-, tus dedos manchados con nicotina y tus manos de trabajador. Tu caminata lenta, y tus ganas de llevarte al mundo por delante. Tu energía, y tus ideas delirantes. Tus conversaciones sin sentido y tus ansias por aprender un poco de todo. Tus enseñanzas. Tus raras creencias, y tu mente abierta. El placer que sentís por la música y por las cosas simples. tu vida sin muchos adornos. Tus ansias por lo nuevo, y por lo que vendrá. Tu forma de disfrutar el presente.

¿Quien sabe donde te encuentras?
-Absurdo-

S.M. -Luna-

Tal vez (o tal vez no) te vas.
Llevándote todo, lo que viviste y lo mucho que te falto disfrutar.
Recuerdos juntos (si los recordas) y de tantas personas que hoy también ruegan por vos.
Por mi parte, vivimos mucho. Fuiste (y te lo confieso) mi primer gran amor. Lo conocí de tu mano, junto a miles de malentendidos, problemas (de la edad), y discusiones. La primera vez que mi corazón sintió dolor.
Me enseñaste a viajar por las estrellas, y en poco tiempo, me convertiste en tu ángel, por eso hoy te escribo estas palabras. Porque se que de ángel no tengo mucho, y de poderes sobrenaturales o sanadores menos. Pero tengo un papel, y un lápiz que a veces sirve -al alma- para descargarse y sanar un poquito. Y también se que te debo mucho, me ayudaste a dar los primeros pasos en lo mas complicad de la vida, y casi sin querer me ayudaste(junto a otros que no vienen al caso) a crear el escudo con el que hoy me protejo -cuanto puedo-.
Para escribir esta carta quise buscar otras tantas que nunca te di. Cartas que en algún momento me ayudaron a superarte. Pero no existen. Recordé que un 31 de Diciembre las queme con el deseo de olvidarte. ¿Resulto? Si.
Pero hoy es diferente, hoy la situación es diferente.
Dejamos de lado el pasado.
Hoy rezo por vos. Porque a pesar de tantos temas banales que alguna vez nos separaron. Hoy mis hadas, mis duendes, espíritus y ángeles te protegen y hacen todo lo posible para que no pierdas las ganas de vivir.
Tal vez no soy yo quien te acompaña físicamente, la situación es complicada, pero te aseguro que igual estoy ahí, tal como hace tiempo escuchando tu alma y dándote animo. A pesar de que por momentos tu mente viaje por dimensiones desconocidas, y así también un poquito de tu alma y de tu cuerpo, sin que nadie pueda hacer nada.
Por momentos vacilas, te vas, desapareces en medio de la bruma casi sin que nos demos cuenta. Yo, esperando los peores pronósticos me despido, inconscientemente también.

Mil luces te iluminan sabelo, no te abandonan, y tal vez alguna vez tenga la oportunidad de contártelo -aunque sin saberlo, lo sabes-.
Y no te das una idea la cantidad de gente que te espera, que te manda sus fuerzas y buenas ondas para que dejes ese lugar frió y vuelvas a la calides del día a día, y al barullo -que es la vida-.

Estoy ahí, y voy a estarlo. Hoy, y mañana también. Acá o en algún otro mundo.
Lo que fue, no importa, esos tiempos quedaron atrás. Te aseguro que no existen rencores y que solo espero que vuelvas a ser el de antes. Si, reite. Ese al que alguna vez tanto odie (sin odiarte), y también tanto quise también. Vos.
Volvé, solo eso.









-Luces, colores, vibraciones, fuerzas, sonrisas, rezos, ruegos, invocaciones, y todo. TODO aquello que se relacione. Y todo eso para vos. Y no solo de mi parte-

jueves, 5 de junio de 2008

Sueños,


(Foto: cortesia de F.)


-Nuestra casa sera blanca, y nuestro amor verdadero.
Dijo el sonriendo mientras sus pies se mojaban en las olas.
-Si, claro.
Respondió ella en un tono sarcástico
-¿No me crees? ¿Alguna vez te mentí?
Ella sonrió, y dijo mirando las nubes.
-Quiero un techo de vidrio para poder ver el cielo, el sol... y por las noches las estrellas.
-¿Algo mas?
Bromeo el.
-¿Que tal si te pierdo?
-No lo creo, pero si es así, la vida se va a ocupar.. Da muchas vueltas pero siempre encuentra el destino indicado ¿no?
-Si, puede ser.
Respondió insegura.
-No te preocupes, yo siempre regreso.
Dijo el mirándola a los ojos.





Después de muchos años, ya estoy preparada. Te estoy esperado, ya es el momento que vuelvas.

¿No lo crees?