jueves, 12 de agosto de 2010

Siento.

Regálame un balcón para la desasón, yo prometo mañanas de paz sobre la arena tibia de la estación que se avecina. Búscame en las rendijas de tu piel, y me encontraras sonriendo dulcemente.
Un barco, el espíritu sereno que dejan las noches de viento. Las espinas solo me rozan, ya no pueden lastimarnos. Los dolores ya no pueden derrivar los pilares que pudimos construir. Vos no te preocupes, que yo mantengo todo en un ordenado balanceo. Entre las distancias y las caricias, entre kilómetros y brisas del nuevo amanecer. Solo busco que tu alma ya no tenga mas lágrimas, que tu voz no se pierda en la multitud, que tus brazos me sostengan bien fuerte, que cumplas tus promesas -y no me sueltes mas-. Que guardes mis marcas en tu cuello, en tu oreja, en tu ombligo y en cada recoveco escondido de tu cuerpo.
Hoy, dame un suspiro suave, casi debil, pero sin mas tristezas, ni huecos en lo profundo del ser. Yo, hasta puedo probar desaparecer, borrarme del planeta, o mudarnos a algún lugar inhóspito de otros mundos, de tu rincón encantado, de mi paraíso de colores. Porque ahora solo busco regalarte pequeñas sorpresas que nos acerquen en la distancia, que calmen ansias, que creen treguas, y que apaguen el tic-tac que atormenta nuestros corazones. No sos mio, ni pretendo que lo seas, porque se que nadie me pertenece, nadie mas que yo misma. Pero cuando puedo tomo prestado tu cuerpo, y me abalanzo a la profundidad de tus huellas, de tu sombra, me convierto en tu espalda, en tus manos, y en tus piernas. Te entrelazo en mis hechizos, y te cuento historias que encontre en mi baúl pintado de rojo. Te siento cerca y lejos, pero te siento, porque poco a poco vuelvo a mi. No importa si un tornado nos quita del mapa, o si me pierdo en la bruma de recuerdos, porque te siento. Te siento a mi lado al atardecer, y te acuesto junto a mi algunas noches. Te siento bien cerquita mio en el sillón, y puedo oír tu respiración en algunas mañanas.
Te siento corazón.
Palpitando en mi pecho, porque vuelvo a tenerlo. Porque vuelven esas ganas incontenibles de gritar bien fuerte, esa enorme pasión por mis pasiones, esa sensación de risas y carcajadas continuas, de sonrisas cómplices y pícaras. Nose si esta es la llave del cofre de los anillos, pero siento. Y sientiendo me siento mas viva que nunca. Ya no caigo en viejos artilugios, una brisa vehemente paso por mi cuerpo -amado o no-, pasó y me dejó luz. Justo ahí, en el medio del alma. Hoy siento, y no lo cambio por nada.

4 comentarios:

Bonjour dijo...

te sigo, siempre, solo espero que no te haya molestado! no se tu nombre pero intenté no hacer plagio! saludos! :D

Erev dijo...

Qué alegría que sientas y que escribas de esa forma tan deliciosa...
No sé por qué razón misteriosa, siempre me veo en tus escritos...

Anónimo dijo...

:) que lindo que es sentir..
no se como encontre esto pero me gusto muchisimo. si hablara el baul rojo...

Anónimo dijo...

-amado o no-, pasó y me dejó luz.
que lindo lo que sentis.
borrega.