Esta bien...

Volve a a mi lado, pero solo unos minutos, tan solo quiero volver a sentir tu piel.
Vení, recostate mientras sentimos el silencio, pero no te acostumbres a tu lado de la almohada. Volvé algunos segundos, dame un beso apasionado, algunas caricias y vete silenciosamente mientras sueño mi mundo de fantasía. Acercate, compartamos un cigarrillo, y algún disco de Fito, pero después, lentamente levantate sin que te lo pida y que el mundo siga su curso.
Calmate, y relajate, pero no te acomodes, es solo hasta que juntes fuerzas y vuelvas a andar. Ven, dame la mano, ahora si, ya nunca te voy a soltar. Deja el aire impregnado de tu aroma y lárgate.
Visitame alguna vez, pero no me avises, prefiero no esperarte ansiosamente por horas, aunque admito que a veces igualmente lo hago.
Claro, no hay problema, esta noche tomemos un vino, pero no volver a enamorarnos.

No, no más.